La ligereza del aceite de árbol de té. Cuidado de la piel con acné. Aceite de árbol de té: tiene un efecto limpiador, penetra en la piel y la tonifica perfectamente. Extracto de flor de hibisco: tiene un efecto calmante y reafirmante. Exfolia la epidermis, calma las irritaciones e hidrata perfectamente. Ácido hialurónico: tiene propiedades regenerativas y antiarrugas. Rellena las arrugas, mejora la firmeza de la piel, protege contra los radicales libres y mejora la hidratación de la piel. Jugo de hoja de aloe: tiene propiedades astringentes y regeneradoras, al tiempo que favorece la lucha contra las imperfecciones. Aceite de pomelo: tiene un efecto relajante y tonificante. Elimina la secreción excesiva de sebo, normaliza y favorece la lucha contra las imperfecciones. Aceite de semilla de girasol: tiene propiedades antioxidantes, fortalece la barrera protectora natural de la piel, la hidrata y la regenera.